Muchos pasan toda su vida cristiana pidiendole a Dios que les quite esto y aquello. Pero Dios jala para un lado para quitarles aquello que les esta haciendo daño y ellos jalan para otro. Entonces Dios los deja quietos pues El no quebranta el libre albedrío que le ha concedido al hombre. No mis queridos hermanos, hay cosas que Dios no las tiene que quitar, nosotros las tenemos que entregar. La santificacion es un proceso cooperativo entre Dios y el hombre. Dios nos muestra y nos da la capacidad, pero nosotros debemos ir tomando decisiones a favor de nuestra vida espiritual.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario